1. Tomar demasiado aire mientras bebe leche
Por ejemplo, un bebé con mala lactancia (que no sostiene la mayor parte de la areola de la madre). O un bebé alimentado con biberón que utiliza un chupete con un orificio demasiado grande. O la inclinación incorrecta del biberón puede hacer que entre aire en el chupete, lo que hace que el bebé trague demasiado aire.
2. Comer muchos alimentos que producen gases
Cualquier alimento que se digiere y fermenta en el intestino puede producir gas. Si una madre lactante o un bebé consumen alimentos que producen más gases, como repollo, cebolla, brócoli y algunos alimentos ricos en almidón (papas, fideos, etc.), leche y productos lácteos, alimentos ricos en fibra (frutas, verduras, etc.), refrescos, bebidas carbonatadas, etc., es más probable que experimenten flatulencia.
3. Mala digestión y absorción de nutrientes
Si su bebé tiene una mala digestión y absorción de ciertos nutrientes, como grasas, carbohidratos (típicamente lactosa), proteínas u otros nutrientes, los "ingredientes" que no son digeridos y absorbidos serán degradados y fermentados por bacterias en el colon, lo que resultará en la producción de varios gases y flatulencia.
4. Menos descarga de gas
La descarga de gases puede verse obstaculizada por problemas intestinales como el estreñimiento y la obstrucción intestinal.
5. Variación de la presión del aire exterior
La presión del aire fluctúa a lo largo del día y estas fluctuaciones pueden causar "flatulencia intestinal" en los bebés. Cuando la presión del aire fuera de los intestinos del bebé es más baja que la presión del aire dentro, el gas en los intestinos se "expande", lo que produce flatulencia.
6. O tras causas poco frecuentes
La flatulencia en los bebés también puede ser causada por enteritis infecciosa, síndrome del intestino irritable (raro en los bebés), sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado, síndrome del intestino corto (generalmente extirpado quirúrgicamente) y otras afecciones.